miércoles, 5 de marzo de 2014

Evaluación rauda de agudeza auditiva

Por: APLE

El conocimiento actual de la transmisión del sonido se inició en el siglo sexto antes de la era cristiana cuando Pitágoras, el matemático griego, introdujo la idea de que el sonido era una vibración en el aire (bien ahí). Siete siglos después, en 175 d.C., Galeno, el médico y griego, también, reconoció que la sensación del sonido se transmitía al cerebro a través de nervios.

La ausencia de conocimientos entre los conceptos del sonido como una vibración aérea establecido; de acuerdo con Pitágoras, y el de la transmisión del sonido al cerebro a través de nervios; según Galeno, la complementó en 1543 el anatomista belga Andreas Vesalio, que descubrió los huesecillos "martillo" y "yunque" en el oído medio. 

Varios años después, en 1546, Ingrassias, descubrió el tercer huesecillo del oído medio, el "estribo". En 1561, el anatomista italiano, Gabriello Falopio denominó la cóclea y en 1851m Alfonso Corti, anatomista italiano, descubrió el órgano que lleva su nombre.

Después de esta histórica introducción, y omitiendo (por el momento) la neurofisiología de la audición, paso a las alteraciones para describir dos pruebas que te ayudarán a evaluar y elucidar ¿en dónde rayos se encuentra la alteración? (con base en preceptos neuroanatómicos previamente aprendidos) y que seguramente podrás aplicar en consulta externa de neurocirugía, neurología, en el servicio de urgencias (y en casa con tus abuelos).

La pérdida auditiva puede ser clasificada en tres tipos:

-Sensorineural: afecciones en el oído interno, cóclea o nervio auditivo (VIII NC).
-De conducción: cualquier causa que de alguna forma limite la cantidad de sonidos externos que "ingresen" al oído interno. Ejemplos: impactación de cerumen, fluido en oído medio, fijación de cadena osicular (pérdida de movimiento de los pequeños huesos del oído).
-Mixta: combinación de las previas

Pruebas clínicas de evaluación con diapasón: Rinne, Weber, Schwabach, Gellé. A continuación las primeras dos, por (arbitrariedad y) amplio uso clínico.

Rinne y Weber (no son pruebas de tamiz, pues existen métodos más objetivos [gr., potenciales evocados auditivos])

Weber: consiste en aplicar el diapasón por vía ósea en ambos oídos de manera simultánea. Esto, se logra al poner un diapason en la línea media (frente, huesos nasales o incisivos superiores)

Lo normal: el sonido será escuchado al centro de la cabeza o en los dos oídos simultáneamente, a lo que se denomina que el "Weber no lateraliza". Si nos encontramos frente a un paciente con una hipoacusia bilateral simétrica, por ej. una presbiacusia, el Weber tampoco lateralizará.

Si estamos frente a un paciente con hipoacusia en un determinado oído y aplico el diapasón en la frente, éste se oirá primero o lateralizará en el mejor oído en el caso de que la hipoacusia sea de tipo sensorial o neural.

Si la hipoacusia es de tipo CONDUCTIVA, el Weber lateralizará HACIA EL LADO ENFERMO.

Rinne: consiste en comparar la audición vía aérea (diapasón ubicado cerca de conducto auditivo externo) y vía ósea (diapasón ubicado en apófisis mastoides) en cada oído por separado. Lo normal es oír mejor o por más tiempo por vía aérea (Rinne positivo).

La prueba es útil para determinar si la hipoacusia en un determinado oído es por un problema en la transmisión del sonido o de tipo sensorio neural.

Cuando existe un problema en la transmisión del sonido por ej en una fijación de cadena osicular, el estímulo auditivo llegará directamente a la cóclea si se da por vía ósea (mastoides), pero si se estimula por vía aérea no se podrá transmitir el sonido en forma adecuada a la cóclea por el defecto en el oído medio, y se oirá más débil por esta vía. (Rinne negativo) .

En el caso de una hipoacusia sensorioneural, la prueba de Rinne es positivo = mejor transmisión aérea.

Si se trata de una hipoacusia mixta, el resultado de la prueba dependerá de la cuantía de cada uno de los componentes.

Classification of hearing loss
— Hearing loss may be classified into three types:

- Sensorineural, involving the inner ear, cochlea, or the auditory nerve.
- Conductive, involving any cause that in some way limits the amount of external sound from gaining access to the inner ear. Examples include cerumen impaction, middle ear fluid, or ossicular chain fixation (lack of movement of the small bones of the ear).
- Mixed loss, which is a combination of conductive and sensorineural hearing loss

Weber and Rinne tests — The Weber and Rinne tests can help direct the remainder of the evaluation, but should not be used as screening evaluations for hearing loss.

Weber test — The Weber tuning fork test is performed by pressing the handle of the tuning fork to the bridge of the forehead, nose, or teeth and asking the patient if the sound is louder in one ear or the other. The sound is heard equally in both ears in patients with normal hearing or symmetric hearing loss.

Rinne test — The Rinne test allows comparison of sound when the tuning fork is placed on the mastoid bone behind the ear (bone conduction), versus when the tuning fork is held near the ear (air conduction). An abnormal result occurs when sound is at least equally loud or louder when the fork is placed on bone as compared with when it is held next to the ear (bone>air conduction). The Rinne test is considered normal when the vibrating fork placed near the ear is louder than when placed on the mastoid bone (air>bone conduction).

One method for performing the Rinne test is to press the handle of the tuning fork to the mastoid bone and ask the patient to tell the examiner when the sound is no longer audible. At that point, the vibrating end of the tuning fork is placed near the external auditory canal (EAC). If the patient can again hear the tuning fork, the Rinne test is normal.